Es un hecho que hoy en día se lee poco. Teniendo internet y televisión, ¿para qué coger un libro y leerlo?. Pero habemos personas "raras" que nos gusta coger un libro y pasar el rato con él y otros tantos hemos terminado estableciendo una especie de relación simbiótica entre la lectura e internet: creando webs y blogs literarios (o de temática cultural, como yo defino el mío) y expresar la opinión del libro que hemos leído.
Este hábito se ha extrapolarizado y ha surgido una nueva figura: la del booktuber, es decir, personas que mediante un canal de YouTube hablan de libros y expresan su opinión de los mismos hablando. Por poner un ejemplo (aunque no tenga nada que ver, que luego os veo venir), es como si AuronPlay o Wismichu hablasen de libros en lugar de los vídeos que hacen. Un punto a favor del booktuber es que su expresividad explícita (porque un blogger siempre está sujeto a malinterpretaciones debido a la neutralidad de la escritura) ayuda a empatizar al espectador y muchos se han animado a abrir sus canales o a leer libros.